AMLO defendió su propuesta de reforma eléctrica asegurando que no habrá expropiaciones.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, defendió su propuesta de reforma constitucional en materia eléctrica, para evitar que las empresas privadas «se apoderen del mercado».
El mandatario intentó calmar a los inversionistas asegurando que no se va a expropiar nada.
«Hablan de que les vamos a expropiar. Se les deja el 46% del mercado y el 54% para la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Si quieren hacer negocios, allí está», dijo AMLO.
A su vez, advirtió a las empresas privadas nacionales y extranjeras que sus negocios en el sector eléctrico deberán tener «ganancias razonables». «A robar, a otro lado», advirtió.
Desde que asumió el poder en 2018, López Obrador se ha opuesto a la reforma energética de su antecesor, Enrique Peña Nieto, que abrió el sector a las empresas privadas, sin embargo, los intentos del ejecutivo han sido frenadas en los tribunales por violar la constitución.
Por ello, envió a finales de septiembre al Poder Legislativo una iniciativa de reforma constitucional para garantizar que la CFE domine el mercado de generación eléctrica a costa de las empresas privadas.
López Obrador respondió este lunes que los que se oponen «son un puñado de empresas que se sentían dueñas de México» durante el Gobierno anterior.
«Si no se hace la reforma a la Constitución, estas empresas terminarán por apoderarse de todo el mercado eléctrico y nos pasaría lo que está sucediendo en España, que las tarifas de la luz están por las nubes», alertó el presidente, quien opinó que los políticos españoles parecen «empleados» de dichas compañías.
De acuerdo con el Gobierno Federal, actualmente la CFE genera el 38% de la energía y el sector privado el 62%, algo que se quiere revertir para que al menos el 54% sea del sector público.
«Esto garantiza a todos los mexicanos seguridad energética, donde la CFE mantiene la misión de servicio social y las tarifas de la luz se podrán mantener a un precio por debajo de la inflación», dijo la secretaria de Energía, Rocío Nahle.
Nahle criticó que ahora la CFE está obligada a comprar primero la electricidad de las empresas privadas, porque «se ponen de acuerdo» para ofertarla más barata, dejando las plantas públicas «subutilizadas».
«La CFE sostiene prácticamente a los privados y les ha dejado el mercado», condenó.
También reivindicó la supresión de los organismos autónomos que regulan el mercado eléctrico, función que sería absorbida por el Gobierno.
Tanto empresas como ambientalistas han advertido de que la reforma de López Obrador pone en riesgo las energías limpias porque no considera las renovables como prioritarias.El sistema actual coloca primero en la red la electricidad de plantas eólicas y solares, por ser menos costosas, las cuales pertenecen a empresas privadas.