La exploración en la Cuenca Tampico-Misantla inició alrededor de 1860, comenzando la explotación en 1904. A la fecha, se han producido 5869 millones de barriles de aceite y 8,447 miles de millones de pies cúbicos de gas. Se han perforado 10,470 pozos, 265 de ellos marinos, de acuerdo a información de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
La Cuenca Tampico-Misantla es la número uno en recursos prospectivos del país, con una estimación de 37 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente. El 86% del hidrocarburo esperado en esta Cuenca es aceite y el 14% es gas.
En lo que respecta a recursos descubiertos, Tampico-Misantla concentra el 21% de las reservas 2P de petróleo crudo equivalente en 2018, de los cuales 67% es aceite y 37% es gas.