Por: Jorge A. Castillo

 

En el Proyecto de Nación 2018- 2024 del virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), en materia de energía dice: “El objetivo es el rescate del sector energético a través de impulsar la producción nacional de energía, la generación de alternativas de energía renovables, el fortalecimiento financiero y operativo de Pemex y CFE, con la finalidad de reducir la dependencia energética del exterior, para que el sector energético se convierta en una de las palancas de desarrollo de México”.

 

También, se ha anunciado la descentralización del gobierno federal, por lo cual la Secretaría de Energía (Sener) se ubicará en Villahermosa, Tabasco; la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se irá a Chiapas; y Petróleos Mexicanos (Pemex) estará en Ciudad del Carmen, Campeche.

 

Rocío Nahle García, quien fue propuesta por AMLO, virtual presidente electo de México, como titular de la Secretaría de Energía (Sener), ha afirmado en diversos foros que durante la próxima administración no se echará atrás la Reforma Energética, con lo cual le vino el alma a más de uno en este dinámico ramo.

 

Aseveró que el siguiente gobierno echará a andar las refinerías, no sin antes ponerlas al 100% de su capacidad de producción, porque “han sido abandonadas y no se les ha dado el mantenimiento adecuado”.

 

Y es que en el país existen, hoy por hoy, seis refinerías, pero se calcula que tres de éstas operan sólo al 40% de su capacidad. “Contamos ya con un diagnóstico del estado en que se encuentran las refinerías y la rehabilitación tardaría de seis a siete meses a partir del 1 de diciembre de 2018”.

Resaltó que las refinerías “han estado prácticamente abandonadas porque no se les ha dado el mantenimiento necesario; un caso dramático es la refinería de Salina Cruz, la cual se inundó, se incendió y nunca se le dio el mantenimiento necesario. Es importante que las refinerías comiencen a trabajar con más carga, más crudo y se empiece a procesar más”.

 

Una o dos refinerías más

 

Respecto a la construcción de las refinerías propuestas, Nahle García informó que el equipo de transición ya trabaja con el Instituto Mexicano del Petróleo para “determinar, de la manera más rápida posible, la capacidad de las refinerías, con el fin de ver la conveniencia de hacer una grande o dos más pequeñas”, las cuales tendrían una capacidad de producción de 300 mil barriles diarios.

Baste recordar que alrededor del 80% de las gasolinas en México se importan, por lo cual es importante que sigan las exploraciones petroleras, pues se necesita una base de extracción para refinar, darle valor agregado y abastecer el mercado interno de gasolina.

 

Nahle García concluyó: “Por mucho tiempo nos han hecho creer que no se puede construir una nueva refinería, pero nosotros demostraremos que, como ha pasado en otras partes del mundo, sí se puede”.

 

Refinerías de los años 70

 

Pemex cuenta con seis refinerías ubicadas en Cadereyta (Nuevo León), Madero (Tamaulipas), Minatitlán (Veracruz), Salamanca (Guanajuato), Tula (Hidalgo) y Salina Cruz (Oaxaca), de las cuales, tres operan al 50% o menos de su capacidad.

Todas estas refinerías fueron construidas en la década de los años 70, pero fue hasta finales de 2015 cuando se comenzó a invertir en ellas mediante asociaciones público-privadas. El gobierno entrante trae como proyecto principal invertir en la reconversión de éstas, generar una o dos nuevas, además del tren del sureste.

 

Dar valor agregado al petróleo

Es necesario generar una política energética adecuada, que incluye avanzar hacia energías renovables, sobre todo en zonas rurales, para llevarles servicios de energía eléctrica para “caminar a la eliminación de la pobreza social, y a la par, darle valor agregado a nuestro petróleo, pues para mover nuestro parque vehicular aún necesitamos los combustibles fósiles”.

 

Para muchos es un sinsentido invertir en nuevas refinerías cuando el mundo está caminando en otros sentidos, hacia energías renovables, que fue una de las críticas que le hizo Ricardo Anaya a AMLO en el tercer debate presidencial. Sin embargo, lo cierto es que se ha dejado de invertir en las que ya existen, con lo cual las refinerías trabajan sólo a un pequeño porcentaje de lo que deberían, así que habría que poner todos los elementos en la balanza, aunado al hecho de que a los combustibles fósiles todavía les queda, según analistas, un medio siglo de vida.

 

La prioridad: crecer la producción de petróleo

 

En días recientes, AMLO dijo que tratará de poner fin a las importaciones de gasolina durante los primeros tres años de su administración. “Priorizaremos el crecimiento de la producción nacional de petróleo crudo, que ha caído drásticamente durante años”.

 

Y añadió: «El objetivo es que a mitad del sexenio dejemos de comprar las gasolinas en el exterior. Construiremos una nueva refinería para dejar de comprar la gasolina del extranjero. Sí hay tiempo, en la India se hizo una gran refinería en tres años, costó 8,000 millones de dólares, ese es mi cálculo”.

Explicó que pronto se comenzarán a definir la ruta para la reconfiguración de las seis refinerías “que están ahora con una producción del 30-40 % y deberán estar al 100%. Vemos la posibilidad de dos medianas o una grande; si son dos, será una en Atasta, Campeche; y la otra en Dos Bocas, Paraíso, Tabasco; si es una grande será la de Tabasco, porque ahí se almacena el petróleo crudo”.

 

Sin marcha atrás, la Reforma Energética

La Reforma Energética del sexenio de Enrique Peña Nieto fue promovida como uno de los grandes logros de la administración actual, sobre todo por la inversión que ha entrado hasta el momento y la promesa de inversión pendiente para la siguiente década.

 

Buena parte del voto duro del virtual presidente electo, AMLO, han expresado su desacuerdo con dicha reforma, por lo cual le han pedido revertirla, pero Nahle García ya ha dicho que esto no sucederá, pero sí se operará de forma distinta a cómo se venía trabajando.

Sobre los precios de la gasolina, dijo Nahle García, la Reforma Energética mandata que éstos se determinarían en la oferta y la demanda, “trabajaremos con lo que hay, con lo que tenemos y no daremos marcha atrás; Pemex participará en el libre mercado, junto con las demás empresas, pero no habrá gasolinazos”.

 

Los altos precios, por la alta importación

 

Añadió: “Hoy tenemos estos precios de gasolina porque importamos 80%, por lo cual estamos seguros que una vez que Pemex aumente la producción de gasolina, será una empresa más que estará en el libre mercado, y será un factor y un competidor muy importante, con lo cual se podrán estabilizar los precios y no necesariamente se dispararán”.

 

Dentro de unos seis o siete meses, insistió, luego de la Toma de Posesión, se podría meter más carga a las refinerías actuales, con el fin de obtener una mayor producción de combustible y así disminuir los costos.

 

A revisar los contratos otorgados

 

Durante la campaña presidencial, AMLO expresó en muchos foros a lo largo y ancho del país que, en caso de ganar la elección, se revisarían los contratos petroleros y, con base en el diagnóstico de éstos, se tomarían decisiones. Por lo pronto, los farmouts se detendrán hasta que el actual esquema sea revisado por el gobierno entrante.

Para no dejar dudas, el próximo primer mandatario subrayó en mayo pasado: “Revisaremos los contratos que se han firmado hasta ahora y todo aquello que perjudique el interés nacional se anulará, se cancelará, y todo se hará por la vía legal; revisaremos todos los contratos y los que sean un fraude, como es el caso de los de Odebrecht, se cancelarán y se iniciarán los procesos para anularlos, no queremos escándalos de corrupción, ni permitiremos la corrupción en Pemex”.

 

Al respecto, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) recibió de buen ánimo la decisión de AMLO de iniciar un proceso de revisión de los contratos adjudicados en el sector energía como consecuencia de la Reforma Energética.

En un comunicado, el organismo regulador indicó que de haber irregularidades se recurriría al Congreso de la Unión: “La CNH recibe con beneplácito la decisión tomada por AMLO, virtual presidente electo. La CNH ha establecido la transparencia y la rendición de cuentas como base de su actuación en el marco del pleno cumplimiento a su mandato legal”.

 

La CNH reiteró su orgullo y satisfacción de conducirse con máxima transparencia, ya que su prioridad es “rendir cuentas a todos los mexicanos”, por lo cual el organismo mantiene la disposición total al proceso anunciado, con la confianza en el trabajo realizado. Al tiempo.

 

¿Qué dice Global Platts sobre el efecto AMLO?

 

AMLO, virtual presidente electo de México, tiene el plan de mejorar las refinerías y construir una o dos para acabar con la importación de gasolina y diésel, lo cual implicaría una mayor compra de petróleo crudo para alimentarlas, explicó Javier Díaz, analista y consultor de energía de S&P Global Platts.

 

Como todo mundo sabe, dijo el especialista, la demanda de gasolina ha aumentado en los últimos tres años. Por tanto, si se pretende desplazar todas las importaciones de gasolina y diésel, se debe producir más, para lo cual se necesita entonces de la importación de materia prima.

 

Recordó que en México la producción de crudo está por debajo de los dos millones de barriles diarios, y según estimaciones de Díaz -y del mismo Pemex-, no aumentará sino hasta dentro de algunos años, cuando se comience a cosechar los frutos de las licitaciones derivadas de la Reforma Energética.

 

Explicó que si se importa el producto ya refinado, se ahorra el costo de elaboración durante cierto tiempo.

 

Cifras oficiales indican que en 2017 se importaron más de 800 mil barriles diarios de gasolina y diésel, por lo cual, de erigir dos refinerías de 300 mil barriles cada una, no será suficiente para desplazar las importaciones totales, por lo tanto, las expansiones o trabajos que se hagan a las refinerías ya existentes jugarán un papel no sólo importante, sino crucial para hacer realidad los planes de la siguiente administración.

 

Para concluir, Díaz advirtió que la construcción de estas obras es muy compleja, tanto por financiamiento como por operación, por lo cual se suelen retrasar, como sucedió con el proyecto de la refinería de Tula, Hidalgo.

 

10 ejes rectores del próximo gobierno en el sector energético:

 

  1. Ir adelante con la Reforma Energética.
  2. No cancelar contratos otorgados de inicio, pero sí hacer una profunda revisión de ellos para evitar posibles actos de corrupción, como el caso Odebrecht.
  3. Aumentar la producción de petróleo crudo hasta la lograr la autosuficiencia energética.
  4. Reconvertir las seis refinerías actuales para que operen al 100% de su capacidad seis meses después de la Toma de Posesión.
  5. Construir una o dos más, en el sureste del país, para contar con una producción adicional de 300 mil barriles diarios.
  6. Apostar por las energías limpias -generar alternativas de energía renovable-, para ir haciendo una transición paulatina de los combustibles fósiles a los verdes.
  7. Beneficiar socialmente a las poblaciones donde se instalen plantas de generación de energía eólica.
  8. Fortalecer a Pemex y a la CFE.
  9. Reducir la dependencia energética externa.
  10. Descentralizar las dependencias encargadas de la energía en México: Sener, Pemex y CFE.

 

¿Quién es Rocío Nahle García?

 

Es ingeniera Química con especialidad en Petroquímica, egresada de la Universidad Autónoma de Zacatecas. Tiene diplomados en Ingeniería de Procesos Químicos por la UNAM y en Ingeniería Económica y Análisis Estratégicos por la Universidad Veracruzana.

En el sector laboral, se ha desempeñado dentro de Pemex en diferentes áreas como ingeniero de procesos de plantas industriales, en análisis y control de calidad y en administración y finanzas en los complejos petroquímicos de Cangrejera, Pajaritos y Morelos.

Ha sido integrante del Comité Nacional de Estudios de la Energía CNEE; integrante del grupo de Ingenieros Pemex Constitución de 1917; integrante del Instituto de Estudios de la Energía de los Trabajadores de América Latina y del Caribe (IEETALC) y es autora de varios artículos en temas del sector petrolero, así como analista sobre el comportamiento y viabilidad en el mercado de los petrolíferos y petroquímicos en México.

Ha sido expositora y ponente en diferentes foros realizados en universidades, cámaras empresariales y espacios de debate en temas como contratos de servicios múltiples; régimen fiscal de Pemex; los energéticos en el campo agrícola; análisis de la estrategia nacional de energía; situación de la industria del amoniaco y fertilizante en México; extracción petrolera y obtención del valor agregado, entre otros.

Participó como asesora en la Cámara de Diputados en las 59 y 61 legislatura y en la 62 legislatura en el Senado de la República con el tema energético; desde 2015 ha sido diputada federal por Veracruz en la LXIII Legislatura, coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena y secretaria de la Comisión de Energía en el Congreso de la Unión. A partir de diciembre será la titular de la Sener.