Por: Jorge Arturo Castillo

El plan energético del próximo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y su equipo de colaboradores del área, encabezado por Rocío Nahle, próxima titular de Energía, incluye la rehabilitación de tres de las seis refinerías de Pemex, con la idea de reducir la importación de gasolinas.

 

Lo anterior coincide con un proyecto entregado en diciembre a autoridades del sector y representantes de Morena y que fue elaborado, en conjunto, por organismos empresariales como la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) y la Asociación Nacional de la Industria Química, así como por el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), la agrupación Ex Funcionarios Superiores de la Industria Petrolera y diversos colegios o colectivos de químicos e ingenieros petroquímicos.

 

Gilberto Ortiz, presidente de la rama petroquímica de la Canacintra, expresó al respecto: “Estamos muy contentos de que se retome nuestra propuesta, que hemos estado empujando desde hace años, porque sabemos que mucho del futuro de México depende de que tengamos una industria fuerte, en la cual la refinación y la petroquímica son la base para que las manufacturas sean competitivas en el mercado interno y en las exportaciones. Las refinerías no sólo producen gasolinas, sino las materias primas petroquímicas”.

 

Siempre hemos trabajado de la mano de Pemex

 

Reconoció que de todos los equipos, sólo el de AMLO tomó en cuenta el proyecto que empresarios y especialistas elaboraron, el cual ha sido impulsado sobre todo por Alejandro Villalobos, ex subdirector del IMP, en el que se pondera una estrecha colaboración con el sector privado para sacar adelante las refinerías, “porque no estamos divorciados de Pemex y siempre hemos trabajado juntos”.

 

Los industriales y especialistas no precisaron en el proyecto los costos ni tiempos de la rehabilitación de tres refinerías, pero Ortiz estimó que es viable rescatarlas con 50 mil millones de pesos (mdp) en siete meses, como adelantó  en su momento Nahle García.

 

Para hacerlo una realidad, deben realizarse muchos ajustes al presupuesto de 2019 para rescatar la petroquímica nacional, pues todas las plantas de Pemex están prácticamente abandonadas, sin recursos para mantenimiento ni personal capacitado, porque jubilaron o reasignaron a otras áreas a los ingenieros petroleros experimentados.

 

Voluntad política y apoyo financiero

 

Con voluntad política y apoyo financiero puede lograrse dicho objetivo, dado que la inversión será muy redituable para que las refinerías que operan hoy en día a 40% de su capacidad, produzcan de nuevo todos los petroquímicos que requiere la industria nacional.

 

De lograrse la meta planteada por el próximo gobierno, la importación de gasolinas podría disminuir hasta en 50%, pero también la de la mayoría de petroquímicos que dejaron de producirse en el país, cuya compra al exterior asciende a 20 mil millones de dólares (mdd) anuales, pues son utilizados en diferentes ramas industriales, como los etilenos para fabricar textiles, detergentes, plásticos y fertilizantes.

 

Rehabilitar y reconfigurar las refinerías no significa lo mismo, porque esto último implica modernizarlas para ampliar sus capacidades productivas prácticamente al doble, pero ambas van de la mano.

 

Solucionar los cuellos de botella

 

A decir de los expertos, las refinerías no están totalmente inservibles ni son chatarra y el sector industrial ha considerado que bastan inversiones bastante pequeñas para comprar algunos equipos y refacciones o hacer adecuaciones que solucionen los cuellos de botella en su operación.

 

Así, es posible aumentar la producción tan solo si se le alimenta con crudos adecuados para su diseño, porque antes recibían crudos muy pesados difíciles de procesar. Eso puede solucionarse de una forma más o menos sencilla: con una disposición técnica, para que sólo sean alimentadas de crudo ligero, y si no se puede utilizar el que se extrae de territorio nacional porque está comprometido para las exportaciones, entonces se podrían importar 500 mil barriles y con ello mejorará su eficiencia.

 

La refinería de Tula se quedó a un 60% de avance, porque incluso ya contaba con crackers, que separan la gasolina de otros compuestos del petróleo mediante el calor, pero no fueron instalados porque Pemex decidió no invertir más en refinación y petroquímica.

 

Redistribuir el presupuesto

En febrero pasado, en una entrevista con Forbes, Nahle García, principal asesora AMLO en materia energética, dijo que el plan del sector contempla la inversión de unos 6,000 mdd para construir dos refinerías en Tabasco y Campeche, que producirían 300 mil barriles de combustibles diarios.

Nahle García expresó que los trabajos en las seis refinerías de Pemex serían para diferentes fases de mantenimiento y reparación.

“Estamos proyectando redistribuir el presupuesto que tiene refinación y enfocarlo a mantenimiento. Tenemos ya una lista de todos los equipos dinámicos, como rotores, compresores, etcétera, y sabemos cuál es la urgencia inmediata y donde tenemos que intervenir, dijo Nahle.

 

Con diagnóstico en la mano

Así, se destinarían 50 mil mdp –2.7 mil mdd– a trabajos de rehabilitación o mantenimiento en las tres refinerías, mismas que podrían estar listas en sólo siete meses a partir del 01 de diciembre próximo, cuando iniciará trabajos de manera formal el próximo gobierno de AMLO. Es un lapso menor al que se ha requerido para obras de refinación en sexenios anteriores.

La próxima titular de Energía resaltó que ya se hizo un diagnóstico de cada una de la refinerías, con el fin de que en el presupuesto de 2019 se redistribuya el dinero para darlo a Pemex Transformación Industrial principalmente para mantenimiento.

“Ahora la prioridad es dar mantenimiento y empezar a meterles carga, con el fin de producir gasolinas. En el segundo año iremos escalando el nivel de mantenimiento, que sería correctivo, y el siguiente, mantenimiento preventivo para la rehabilitación”, aclaró Nahle.

 

IMP, el brazo tecnológico de Pemex

Sugirió que podría ser una sola nueva refinería, ubicada en Dos Bocas, Tabasco. A decir de AMLO, el plan sigue siendo construir dos, una de ellas en Dos Bocas y la otra en Atasta, Campeche. El costo de las dos nuevas refinerías sería de entre 7,000 y 8,000 mdd.

Se dijo que en este agosto de 2018 se dará a conocer el plan de refinerías, el cual despejará dudas, sobre todo para saber si se reconfigurarán las seis refinerías de Pemex o si sólo se les dará mantenimiento a fondo. Para ello, los planes de refinación se consultarán con el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), como brazo tecnológico de Pemex.

 

Las seis refinerías de Pemex operan apenas el 40% de su capacidad, pero en buena parte ello se debe a la baja calidad del crudo que se produce hoy día en la Sonda de Campeche.

 

Inyección millonaria en dólares a EyP

 

AMLO anunció que buscará elevar la producción de Petróleos Mexicanos (Pemex) en 600 mil barriles diarios en los próximos dos años. Para ello, anunció que a partir del próximo año se invertirán 75 mil mdp extras en inversión en exploración y producción.

La meta petrolera de la nueva administración que iniciará en diciembre próximo será de 2.5 millones de barriles (mdb) para el 2020.

AMLO subrayó al respecto: “En 14 años se ha perdido 1.5 mdb debido al abandono del sector energético y de la industria petrolera”.

 

Voces disidentes

 

Sin embargo, voces como la de BBVA Research, sobre este tema dijo que la propuesta de revivir la producción petrolera de 1.9 a 2.5 mdb diarios, hecha por el virtual presidente electo, AMLO, no es realista.

“La meta de incrementar la producción petrolera a 2.5 mdb diarios en dos años no nos parece realista, aún en el caso en que se haga mediante asociaciones con empresas privadas”, detalló en su análisis.

Como se dijo antes, el plan anunciado por AMLO es inyectar 75 mil mdp en inversión para exploración y perforación, con el fin de frenar la declinación petrolera que experimenta el país.

Sin embargo BBVA Research coincidió en que si no hay más inversión en dicho rubro, la producción petrolera seguirá mostrando un declive.

Desde julio 2017, confirmó la consultora española, la producción mensual de crudo de Pemex cayó por debajo de los dos mdb diarios y no ha podido recuperarse.

En realidad, alertó BBVA Research, “la nómina del sindicato, el robo de combustibles y los problemas de corrupción en Pemex han sido las fuentes más relevantes de las pérdidas financieras”.

Por último, aconsejó que Pemex siga aprovechando los esquemas de asociación con privados, sobre todo en aguas profundas, donde se puede beneficiar de capital y conocimiento.